Sobre el bloqueo o embargo.

Situar las cosas dentro de contextos, es de suma importancia, y cuando me refiero a contexto, me refiero específicamente a colocarlas dentro de un marco de tiempo acorde, puede ser en algunos casos años, décadas o centurias.
Piedra angular del capitalismo, sistema que a juzgar por la historia reciente principalmente, ha demostrado validarse como opción preferente a otros inventos sucedidos, lo es la propiedad privada, luego como método para su funcionamiento está el mantenimiento de la competencia y otros sucedaneos destinados precisamente a vigorizar este tipo de propiedad en beneficio de un país. Por lo que atacar la propiedad privada, viene siendo como atacar la base sobre la que se sustenta el sistema de los países del primer mundo, quienes tiran del carro de la humanidad y algunos otros en vías de cumplimentar con éxito el sistema capitalista. Si a esto le sumamos la inoperancia demostrada del estado como propietario, tendremos un panorama sobre el tema a que me quiero referir.
Lo anterior, ha sucedido y sucede aun hoy en nuestros días, quizás por aquello de ser los humanos quienes tropezamos no ya dos veces, sino varias, con la misma piedra; con resultados desastrosos en lo peor o el derroche de recursos para ganancias pobres.
En Cuba en particular, para poder llevar a vías de efecto su entronización en el poder, el sátrapa ahora en las últimas, desde el mismo principio confiscó todo aquello que pudiera entorpecer ese propósito de entronizamiento, industrias, servicios, todo pasó a manos del estado; por ser EEUU desde los tiempos de la colonia y luego durante la época republicana con mayor alcance, propietario de muchas de esas industrias y muchos de esos servicios, fue el principal perjudicado, sin descontar los nacionales cubanos igualmente propietarios y otros extranjeros poseedores de negocios, etc. Dejo a quienes poseen el dato la cifra final de todo aquello, indudablemente cuantiosa.
Han transcurrido 50 años, se mantiene el mismo gobierno que realizó aquellas confiscaciones, el cambio es cosmético, nada de esencial o de la raíz del mal, esta se mantiene intacta; de manera que no veo que hoy, haya cambiado el propósito de aquellas acciones realizadas por el gobierno estadounidense, para señalar aquellos que atacan el basamento de la nación americana en particular, la propiedad privada; levantar el bloqueo o embargo, permitiría en el futuro la repetición de tales actos, no enviaría la señal correcta a quienes quisieran ir contra ese basamento, a quienes quisieran socavar de alguna manera esa estructura; no se trata de que ha pasado el tiempo o que no se ha logrado algo, el objetivo aquí principal, y esto es importante, no es lograr algo, es evitar que se repitan esos actos, lesivos del sistema estadounidense. Interpretar lo sucedido como que perseguía algún objetivo o logro es equivocado, se persigue evitar, advertir que no habrá impunidad o será pasada por alto la ofensa, ese es el verdadero sentido del embargo.
El gobierno cubano, se incluye dentro de los países que promueven o apoyan el terrorismo, o ambas, es decir, es un gobierno hostil a EEUU, que persigue de distintas maneras el fin de ese país, manifestado innúmeras veces públicamente, llevado a vías de hecho mediantes diversas maneras como puede consultarse en la historia. Mientras la guera fría quedó atrás, el gobierno de Cuba continuó de manera solapada aupando la violencia; alguien cree a esta altura que el gobierno cubano no tuvo nada que ver con la elevación de Chávez a la primera magistratura?, alguien a fecha de hoy puede negar con conocimiento de los hechos la ingente y recursiva participación en la radicalización de procesos al estilo de la dictadura cubana?, a la vista están los resultados de años de sembrar el odio, la envidia y cuanto sentimiento bajo pueda generar el hombre en su corazón.
Durante la II Guerra Mundial, los EEUU internaron a japoneses que vivían en el territorio como medida precautoria, lo propio pero sin justificante o justicia que le asistiera no realizó el gobierno cubano con los opositores al mismo inicio de la ingesta dictatorial en suelo cubano?. Demostrado es, la participación activa en diversas actividades dentro del territorio estadounidense para recabar información de inteligencia, crear conflictos y propiciar el engaño del pueblo americano. Permitir los viajes a Cuba, es convertirse en partícipe de esa política, medrar con el dictador a csta del pueblo cubano. Es suficiente y valida la actuación hasta ahora del gobierno norteamericano, permitir el comercio en alimentos y otras necesidades perentorias, no aupar políticas que beneficien a la dictadura es parte a la vez, de la actitud tradicional de apoyo en lograr la libertad de Cuba.
La dictadura agoniza, se muere, perece, esto es verdad de perogrullo, y van ahora a proporcionarle oxígeno, a propiciarle o facilitarle que siga aterrorizando al pueblo cubano, caramba, entonces si se pueden untar ungüentos en dicha sea la parte y sentarse a esperar un poco más. Piensen tan solo, en la realidad diferente de Corea del Norte, sinceramente peor que nosotros los cubanos, en otros sitios más alejados, menos expuestos a la democracia de EEUU a traves de su cultura de sus desempeño; esto sin duda, nos hubiese tocado vivir, y si hoy no es la realidad terrible de esos países, es precisamente por quien es el vecino del norte y cuanto ha hecho hasta hoy.
Sí, cala hondo el deseo, pero es contraproducente confundirlo con lo que aconseja la razón y la historia, porque como bien dice La Biblia, cuando no se hace justicia sobre la obra mala, el corazón de los hombres se inclina al mal. El bloqueo o embargo, evitará o mermará esa inclinación en las dictaduras repetidas o por venir. No es un arma, no se confunda, el bloqueo es un medio efectivo de hacer valer y prevalecer la justicia; lo demás, es propaganda filtrada e inflitrada del dictador.
Finalmente, pero no menos importante, piensen aquellos que visitan aquí, aquellos que riegan abundantemente las arcas del dictador con multas incluídas, si venir les hace mejor a ellos o peor a su país; si una estadía en Cuba, vale por la libertad de su país; si venir a enterrar a alguien, dará vida a los que quedamos en esta inmensa prisión o si por el contrario es mejor dejar que los muertos entierrren a sus muertos. Piensen, hablen a si mismos, dialoguen con su corazón, a quien prestan su presencia para ser usados?, acallados aun a donde huyeron buscando la libertad, acaso no merecemos esa libertad los que quedamos por imposibilidad o causa mayor?; busquen la respuesta a esto: hago más por mi país yendo a el en dictadura o alzando mi voz aquí todo lo alto que puedan escucharme, aun los que no quieren oir, para pedir la libertad de los que allá quedaron o mantendré el silencio para poder entrar y salir de esa prisión?.
Ustedes los de fuera, son libres de ir y venir, por eso están fuera; pero muchas veces, en esta vida, la opción es de deber, no de poder, de abstenerme, no de participar o por asomo hacerme cómplice.
No se va al país esclavizado, sino para dar la libertad; no se hace gran cosa repartiendo miseria entre los pobres, para quedar bien con uno mismo o con los pobres.