Videos del velorio, la madre del opositor occiso y la cuestión de #Cuba.

No sé si será por la mala calidad de la imagen o es que se trata de dos momentos diferentes, pero la foto que se publicó de Juan Wilfredo en una "caja de cartón" no tiene nada que ver con la imagen que se muestra en este video. Tal vez sea que la foto fue tomada antes de que le cambiaran de ropa, o es que en este video, ¿el muerto no es Juan Wilfredo?



Viendo aquí a la madre de "el estudiante" como le decían a Juan Wilfredo Soto García, comprendo por qué no ha podido actuar como Reina Luisa Tamayo. Esta pobre mujer no tiene fuerzas, se está muriendo y no sólo porque le hayan matado a un hijo sino porque desde antes ya no podía ni con su alma. Da pena, da lástima. No podemos pedirle a esta mujer que haga campaña por la muerte de su hijo como hizo la madre de Orlando Zapata, porque desgraciadamente no tiene ni la fuerza física, ni mucho menos la fuerza intelectual, como la tuvo en su momento la gran Reina Luisa Tamayo.



Tal vez la tecnología no valga para que los cubanos de Cuba conozcan la oposición, tal vez internet con sus twitters y sus facebooks, sean un grito en los oídos sordos de los cubanos residentes en el infierno; pero hay algo que la tecnología y la oposición, la blogósfera o la globosfera, tan inútiles a la hora de reclutar, de informar, de civilizar, de libertar a sus propios vecinos, los hace útiles de repente: Nunca más un crimen de los Castro quedará en la oscuridad, al menos para el mundo que escucha, que quiere ser reclutado, que quiere estar informado, que ya es libre y civilizado. Ese mundo, no podrá apoyar a los Castro nunca más. El embargo nunca será levantado y la Unión Europea nunca levantará las sanciones, no antes de que se respeten los Derechos Humanos en Cuba, a menos que quieran quedar ante la opinión pública internacional como cómplices de los dictadores opresores.

Ahora solo falta que Dios y los Castro, aprieten lo suficiente para que se produzca otro maleconazo; pero una vez producido;  ¿qué podría pasar después?. Lo lógico sería la represión por parte del "pueblo enardecido" primero (léase polícia vestida de civil) , y si no funcionara, luego la policía, vestida de policía, el ejército, los tanques, lo que fuera necesario. Pero esta reacción pondría en bandeja de plata el pretexto para una intervención extranjera, lo cual desembocaría en una guerra sangrienta porque sabemos que el General Raúl Castro llamaría al pueblo a defenderse de una injerencia, de una invasión largamente esperada, y el pueblo lo haría, hasta la última gota de sangre. Están programados para eso, desde antes de nacer.

Podría pasar también que ante una protesta masiva y espontánea el gobierno cediera, sin reprimir, lo permitiera; pero entonces quién negociaría con el régimen, quién representaría a la oposición aunque no necesariamente la liderearía. He aquí la cuestión.

Liú Santiesteban.