Por Pablo Felipe Pérez Goyry*Analista y Periodista Independiente Cubano.
Los últimos acontecimientos en el archipiélago cubano, dejan una estela de arcanos y no respuestas, aun para un ilustrísimo profeta.
Sin embargo, con la sinceridad que caracteriza a este analista y periodista, me atrevería asegurar que más allá de los cambios democráticos, a que aspiran la generalidad de cubanos, si es posible que ocurran cambios significativos, de la administración Obama, sobre la política exterior hacia Cuba.
Una evidente prueba de que soplan vientos en este sentido, por ejemplo, es la carta enviada a Obama, por el senador Richard Lugar, jefe de los republicanos en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, donde le expresa se debe cambiar la política hacia la isla por parte de los Estados Unidos y se designe un enviado especial para Cuba. También, se escuchan con frecuencia voces de integrantes del equipo Obama, con relación a poner punto final a las restricciones a viajes, envíos de remesas de cubanos a la isla y que todo el que lo desee pueda hacer turismo en el archipiélago cubano.
"El embargo no ha cumplido su cometido, no ha sido efectivo, para frenar o asfixiar a Cuba", dijo el congresista Mel Watt, al prometer estimular un movimiento para terminar con esa política.
Asimismo, desde hace algún tiempo, se habla con insistencia del retorno de Cuba a la Organización de Estados Americanos. En su momento, Insulza, había expresado que ''hay que rescindir, revocar, la resolución de 1962 por la que se expulsó a Cuba''. Estados Unidos ha sido históricamente el promotor de no aceptar a la isla en la organización panamericana.
Para alborotar el avispero, más de lo que está, visitan la “isla cárcel” un grupo del Congressional Black Caucus, y “la comunidad cubanoamericana del Sur de la Florida ya ha comenzado a opinar acerca de lo que algunos han calificado como el inicio de un cambio de la política estadounidense hacia la isla”, y, para otros es un insulto a la comunidad cubana exiliada... No faltan, me incluyo, los que ven en la visita de los congresistas una evidente rectificación y de que la política que han empleado los Estados Unidos hacia Cuba en las últimas cinco décadas no ha funcionado, para se logre una transición hacia la democracia y el fin de la dictadura Castrocomunista.
Es hora de cambios, y es posible que en la Cumbre de las Américas, que se celebrará en Trinidad y Tobago, entre el 17-19 de abril, se muevan acciones encaminadas a se readmita Cuba en la OEA , en la asamblea general del 1 de junio en Honduras. Tampoco es un secreto, que hay indicios de en los próximos días, el presidente Barack Obama anunciará un cambio hacia Cuba, que permitirá a los norteamericanos visitar la isla.
No es la primera vez que una delegación de congresistas visita el archipiélago cubano, aunque hay que reconocer que en esta oportunidad tuvo un clima en favor de una aproximación entre los dos contendientes históricos. Una nota de prensa de la Cancillería cubana manifestó que en el "amplio intercambio" se abordó el tema de las relaciones bilaterales con la llegada de Obama a la Casa Blanca.
"Es hora de hablar con Cuba, estamos convencidos, por las conversaciones que tuvimos, de que los cubanos quieren diálogo y relaciones normales con Estados Unidos", dijo a su regreso a Washington Bárbara Lee, líder de la delegación y una de los tres que se reunieron con el dictador Fidel Castro.
Los congresistas entregarán sus conclusiones al presidente Barack Obama, antes de la Cumbre de las Américas, donde presidentes de la región prevén pedir un cambio en la política de Estados Unidos hacia Cuba y el fin del embargo contra la isla en vigor desde hace 47 años.
¿Se va a terminar el embargo y la ley de ajuste cubano? ¿Llegará la democracia a Cuba? Infortunadamente, para los desesperados, no les queda otra alternativa que tener paciencia, y siempre mirar con sabiduría cómo han sobrevenido las transiciones en otros países ex comunistas, y, cuál es el trato diplomático de Estados Unidos con regímenes comunistas como el de China, Corea del Norte y Vietnam. Es decir, los cambios deben promoverlo los cubanos, en particular los que están en Cuba..., y, no se vislumbra que pueda suceder en el corto plazo... Estoy convencido de que la experiencia ha demostrado que por la fuerza no han sido posible cambios en Cuba, y que en cincuenta años la peor parte la ha sufrido el pueblo cubano, especialmente los que están en el archipiélago, y, el régimen Castrocomunista continúa en el poder.
El presidente Barack Obama y los hermanos Castro han comenzado la partida de ajedrez, y más allá de los intereses políticos, de tener un final conciliador beneficiaría principalmente a los cubanos que están en Cuba..., que tienen centradas sus esperanzas en un alivio de las restricciones a los viajes de sus familiares y a las remesas, un tema peliagudo, pues, en Estados Unidos viven más de un millón de cubanos y las opiniones están divididas.
Finalmente, reflexionando sobre estas realidades, recuerdo lo exclamado por Cicerón: “O tempora! ¡O mores!”. Y yo pido: ¡Dios salvaguarde a la Nación Cubana , y a mí no me olvide!
Ver Fotografías en: http://contextuspablofeliperezg.blogspot.com/2009/04/se-va-terminar-el-embargo-y-la-ley-de.html
*Pablo Felipe Pérez Goyry. Premio José María Heredia de Periodismo 2008. Miembro del Instituto Nacional de Periodismo Latinoamericano (INPL). Miembro de la Federación Internacional de Periodistas Digitales (FIPED).
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De ahí la vital importancia de los otros dos actores que nombre un párrafo atrás.
ResponderEliminarLa diáspora cubana… Menudo tema. Daría para un grueso volumen lleno de sesudas reflexiones. Para empezar, y si queremos demostrar que hemos aprendido algo fuera de Cuba, hemos de reconocer que no es un sujeto monolítico de intereses comunes. Cada uno es de su padre y de su madre, y ve la dictadura cubana como le permiten ver sus prejuicios ideológicos. Así que no voy a dirigirme a todos los emigrados cubanos, sino a aquellos que dicen querer superar este trágico capítulo de nuestra historia que es el castrismo. Si queremos ir a la raíz del problema, hay que dejarse de evasivas y reconocer que lo peor del castrismo no es la miseria material que nos ha traído, sino que nos ha permitido justificar ante nosotros mismos y los demás actitudes lamentables, una miseria moral sin precedentes . Cuba es una ruina humana, los valores morales prácticamente han desaparecido, el “todo vale” es el himno popular que allí se canta a diario. Ahora podríamos cometer el terrible error de presumir que esa decadencia moral procede de la pauperización popular, de la escasez material, etc… Qué pena que Dostoievski no haya sido más leído en nuestra isla. Los liberales rusos del siglo XIX justificaron muchas actitudes antisociales en base a la existencia de la pobreza. “Si el Zar no quiere que roben, que les de pan”. Un siglo después, ese mismo argumento dio alas a los bolcheviques, acabando éstos antes que nada con los propios liberales. Lenin, Trotsky, Stalin y los suyos se convirtieron en los tribunos del pueblo. Ya no había crímenes, simplemente se hacía justicia. Y la justicia derivó en la mayor de las tiranías. Del mismo modo, el cubano de la isla –no digo todos, ni mucho menos- roba porque quiere robar, porque es más cómodo robar que doblarse el espinazo. La cubana –no digo todas ni mucho menos- jinetea porque es más fácil putear que buscarse la vida de un modo digno. Pero hay modos dignos de desenvolverse allí, aunque son más duros, eso sí. Yo los he visto y vivido.
Si partimos de esta consideración crítica para con el cubano de la isla, si somos honestos en nuestra consideración antropológica hacia él, podremos buscar medidas más acertadas a la hora de solucionar -o al menos paliar- el problema que nos ocupa. ¿Cuántos de ustedes han enviado dinero a la isla para unas reformas caseras y ese dinero ha acabado destinado a la gozadera y a la ...
continua en el blog Ronquidos en la hora apocaliptica
¿Todo el mundo habla?...creo que no, al menos aquí, borraron el comentario anterior. que pena.